A diferencia de los hombres, quienes producen espermas continuamente, las mujeres nacen con una cantidad finita de alrededor de un millón de ovocitos que darán lugar a los óvulos que irán madurando en cada menstruación, una medida que va disminuyendo con el paso de los años hasta la llegada de la menopausia.
La baja reserva ovárica se caracteriza por un bajo número de óvulos disponibles en los ovarios de la mujer, condición que aparece de forma natural en todas las mujeres según van envejeciendo, motivo por el cual, muchas mujeres que intentan quedar embarazada después de los 35 presentan dificultades para lograrlo.
Sin embargo, existen otros factores que pueden comprometer la disminución de la reserva ovárica, como el estrés, exposición a agentes tóxicos, tratamientos contra el cáncer como la quimioterapia y radioterapia que afectan los ovarios, cirugía ovárica, menopausia prematura familiar, consumo de cigarros y alcohol.
El doctor de la Clínica Procrear Roly Hilario menciona que “Si la pareja está en la búsqueda de un embarazo exitoso y hasta el momento no lo logra, uno de los primeros factores a evaluar es la reserva ovárica. Mientras la edad de la mujer no supere los 30 años, la reserva se considera buena; sin embargo, la calidad y cantidad de los mismos se verá afectada a partir de los 35 años, hasta la llegada de la menopausia, cuando la reserva se agota”.
Para conocer la reserva ovárica se realizan una serie de pruebas donde se evalúa la respuesta del ovario al ser sometido a una estimulación ovárica, sobre todo en aquellas mujeres que llevan un año buscando el embarazo, efectuándose perfiles hormonales como la hormona antimulleriana (AMH) la cual puede realizarse en cualquier día del ciclo, o la hormona folículo estimulante (FSH) que se realiza entre el día 3 y 5 del ciclo ovárico, ambas se encuentran implicadas en el desarrollo y maduración de los folículos en el ovario. Son sus niveles los que informan sobre la calidad de los folículos que se encuentran aún en el órgano reproductor.
La baja reserva ovárica es uno de diagnósticos a los que se enfrentan muchas mujeres cuando asisten a una consulta de fertilidad. Los tratamientos a elegir están en función de los resultados de las pruebas realizadas, su edad y el historial médico. Según la situación de estos resultados se puede optar por:

– Fecundación in vitro utilizando sus propios óvulos, donde las probabilidades de éxito dependerá de la cantidad de óvulos de buena calidad que se puedan extraer tras una estimulación ovárica.

– Fecundación in vitro con óvulos donados, técnica que tiene mayores probabilidades de éxito debido a que los óvulos de la donante son seleccionados en laboratorio para que tengan la mayor calidad posible. Esta opción se recomienda cuando los resultados de las pruebas realizadas se observan muy alteradas.

– Congelación de óvulos, las mujeres que aún no deseen tener hijos pueden preservar su fertilidad bajo esta técnica sin comprometer su fecundidad ni la calidad de los sus óvulos.

Es importante que consulte la mejor opción para maximizar las probabilidades de lograr un embarazo exitoso. En la Clínica de Fertilidad Procrear contamos con los mejores especialistas a fin de brindar asesoría personalizada en reproducción asistida, con un solo objetivo, convertir a nuestros pacientes en padres.