SERVICIOS DE EVALUACIÓN DEL HOMBRE

Para evaluar al factor masculino, las pruebas del pasado para el varón que al igual que la mujer eran de tipo orgánico y funcional, ahora gracias al avance de la tecnología de tratamiento en el laboratorio de Reproducción Asistida se ha reducido a las siguientes pruebas (lo más importante: todas se hacen en una sola muestra de esperma, una variación lograda en nuestro laboratorio de Procrear). En el caso del varón se les recomiendan:

Con este chequeo masculino se dispondrá de toda la información necesaria para tomar una decisión correcta para su tratamiento. Cabe destacar que cuanto más se retrase tener descendencia, más probabilidades tendrá el embrión de formarse con anomalías cromosómicas que harán que no evolucione o que acabe en un aborto. Además a partir de los 45 años, al menos la mitad de los embriones podrían ser portadores de alteraciones cromosómicas. Por este motivo, es importante realizar las pruebas necesarias para saber el pronóstico y tratemos adecuadamente un posible trastorno.

El espermatograma computarizado se basa en el sistema C.A.S.A (Análisis Seminal Asistido por Computadora) el cual hace uso de un software que permite un análisis seminal con elevada precisión y genera resultados con mayor fiabilidad que una análisis subjetivo.

Este sistema determina la concentración, motilidad, vitalidad, morfología y fragmentación del ADN de manera objetiva y rápida siguiendo los criterios de la Organización Mundial de Salud (OMS). Puede examinar más de 500 millones de espermatozoides en 10 minutos.

La fragmentación de ADN es el daño producido en la cadena de ADN del espermatozoide, que se manifiestan en forma de rupturas, este daño se debe a múltiples factores como un elevado estrés oxidativo, la edad, el consumo de alcohol, el consumo de cigarro, presencia de varicocele, etc. Un elevado porcentaje de espermatozoides con fragmentación de ADN en el eyaculado puede generar infertilidad y abortos espontáneos.

La evaluación de la fragmentación de ADN consiste en determinar cuál es el porcentaje de espermatozoides que presentan fragmentación de ADN en eyaculado y para ello se utiliza un método denominado SCD (Dispersión de la Cromatina Espermática). Un porcentaje de espermatozoides con fragmentación de ADN superior a un 30% se considera anormal.

El cultivo seminal se realiza para identificar agentes patógenos como bacterias u hongos que pueden estar causando infección aguda o crónica a nivel de los conductos genitourinarios. La inflamación a nivel de las vías seminales y testículos comprometen la calidad espermática y pueden causar infertilidad. Dentro de la variedad de bacterias encontradas tenemos algunas identificadas comúnmente como la Escherichia Coli y Enterococus Fecalis.

El cultivo seminal está indicado en caso de un bajo volumen seminal, presencia de sangre en la muestra seminal, elevada cantidad de leucocitos en el semen, aglutinaciones de espermatozoides, teratozoospermia, oligozoospermia y en casos de posible infección de las vías seminales.

La recogida de muestra se realiza en un frasco estéril por masturbación previamente habiéndose lavado manos y genitales.

MEJORA DEL ESPERMA EN EL LABORATORIO

La capacitación espermática es un procedimiento que permite la separación de los espermatozoides móviles de los demás elementos del eyaculado (espermatozoides inmóviles, células redondas, leucocitos y otras sustancias). Este proceso mejora la calidad espermática en los Tratamientos de Reproducción Asistida (TRA): Inseminación Intrauterina (IIU), Fecundación In Vitro (FIV) o Inyección Intracitoplasmática de Espermatozoides (ICSI).

Los métodos que se utilizan para la capacitación espermática son gradientes de densidad y Swin Up. La elección de uno de estos métodos por parte del biólogo dependerá de la calidad seminal que presenta el paciente.

La capacitación espermática con selección de sexo consiste en enriquecimiento de un medio de cultivo con espermatozoides que presentan el cromosoma sexual elegido sean masculinos o femeninos. Esta separación entre espermatozoides masculinos y femeninos se logra debido a las diferencias de peso, densidad y movimiento de los espermatozoides portadores del cromosoma Y (masculinos) y de los espermatozoides portadores del cromosoma X (femeninos) que contiene un 2.8% más de ADN en su genoma (lo cual hace a los espermatozoides femeninos más pesados que los masculinos).

La capacitación espermática con selección de sexo aumenta la probabilidad de tener bebés de sexo masculino en un 78% a 85% y en un 73% a 75% cuando se quiere tener bebés del sexo femenino.