Usualmente siempre escuchamos que el sobrepeso puede perjudicar nuestra salud, así como causar problemas de infertilidad, sin embargo, a lo opuesto de la obesidad, tener bajo peso también influye en las probabilidades de procrear, comparado a personas que tienen una alimentación adecuada. Podemos saber si nos encontramos con un peso inferior cuando calculamos nuestro índice de masa muscular y este es menor a 17.
Cuando se tiene un peso demasiado bajo el cuerpo interpreta que no existe la disposición suficiente de nutrientes, y menos para una gestación, por lo que disminuye sus funciones reproductivas a la espera de que el organismo mejore sus condiciones y obtenga los alimentos necesarios para asegurar una buena función.
Como resultado de esta variación, las mujeres que tienen bajo peso o desnutrición están sujetas a alteraciones uterinas y menstruales, lo que conlleva a tasas bajas de implantación y embarazo, tanto en concepción natural como en técnicas de reproducción asistida. En consecuencia, se afecta la producción de hormonas siendo estas insuficientes causando problemas en la ovulación, debido a que la grasa corporal tiene como función ayudar en la producción de la hormona liberadora de gonadotropina (GnRH), la cual activa la secreción de otras semejantes que ayudan a desarrollar a los óvulos y espermatozoides, como la hormona luteinizante (LH) y la hormona de folículo estimulante (FSH).
A continuación te mostramos 3 problemas que podría ocasionar la desnutrición en tu fertilidad.
Anovulación: una de las dificultades de tener bajo peso son los problemas de ovulación, debido a que el cuerpo ya no produce tejido uterino, adquiriendo una menstruación irregular y en casos más graves causar amenorrea o ausencia de la menstruación.
Pocos niveles de estrógeno: cuando la grasa corporal es deficiente, el flujo de hormonas como el estrógeno, es interrumpido o es producida en baja cantidad generando que la glándula pituitaria evite la liberación del óvulo.
Riesgos de pérdida: en el caso de lograr el embarazo existe un mayor riesgo de no llevarlo a término, a causa de que el revestimiento uterino es inadecuado, de implantarse el embrión este no podría llegar a desarrollarse causando una pérdida.
Para mejorar la búsqueda de un bebé, es importante tener un peso adecuado, una dieta que contenga todo tipo de frutas y verduras, que nos brinde vitaminas, minerales, oligoelementos y antioxidantes que son esenciales para la salud reproductiva. Además de consumir grasas saludables como frutos secos, proteínas en especial el consumo de pescado y productos lácteos.
Sin embargo, existen diversos factores que pueden afectar la salud reproductiva. Por medio del Chequeo Ginecológico de Fertilidad evaluaremos los 8 órganos reproductores, desde la vulva, vagina, cuello uterino, útero, endometrio, ovarios y mamas mediante 5 exámenes especializados. En la clínica de Fertilidad Procrear estamos dispuestos a contribuir con sus deseos de ser padres, brindando la asesoría y el profesionalismo que tu sueño necesita. Durante el mes de septiembre ven y reserva tu consulta de fertilidad a sólo s/50. Solicita información y da el primer paso.
